Jesús García: el documental «Medjugorje» verá la luz en «un mundo más fértil para estas historias»

Tras su éxito editorial con Medjugorje Que hace una chica como tú en un sitio como éste y lanzarse al mundo audiovisual con el éxito de Hospitalarios, Jesús García
se ha embarcado en la gran obra de su vida, un documental sobre el
lugar que cambió su vida cuando fue enviado en 2006 para realizar un
reportaje. Se trata de Medjugorje, el documental definitivo,
y al igual que en su momento hizo con su libro ahora a través de la
pantalla arrojará más luz y mostrará al mundo un lugar que se ha
convertido en un auténtico fenómeno de conversiones que recibe cada año a
cientos de miles de peregrinos.

El coronavirus y la pandemia mundial que ha provocado este virus también ha afectado a los plazos que García y su equipo se habían marcado. De hecho, los cines a día de hoy siguen cerrados y la incertidumbre en todo el mundo es muy grande. 


Sin embargo, el director de este documental considera que ni el mundo
ni tampoco el documental será el mismo tras este acontecimiento, pero
que ahora será una tierra más “fertil” para producciones espirituales
como esta de Medjugorje. En conversación con Religión en Libertad, Jesús García profundiza sobre el documental, sobre el fenómeno que representa Medjugorje y también sobre el papel que este lugar puede jugar en el mundo:


– ¿En qué fase está el documental tan esperado de Medjugorje que produce el Proyecto Gospa Arts?


– Es obvio que estamos en un momento de ‘pies quietos’ que, sin haber parado el proyecto, sí lo ha podido cambiar. El
confinamiento nos ha dado la oportunidad de enfocar otras perspectivas
más propias de momentos extraordinarios, y estos momentos lo son.

Elementos del documental sobre Medjugorje que eran meramente rutinarios,
ahora tienen un “valor histórico”, un calado mucho más profundo, y nos
detenemos más en cosas que nunca me hubiera detenido tanto.

-¿Cómo qué?


– Como la última aparición a Mirjana del día 2 de mes. Providencialmente, un equipo nuestro estuvo allí grabando ese día, el 2 de marzo, sin saber que era la última.
Podríamos haberlo dejado para abril y nos lo hubiésemos perdido. Ya
estuvimos otras veces, pero esta ha sido la última aparición del día 2
de cada mes. Además lo hicimos con especial cariño, no limitándonos solo
a esperar en la Cruz Azul —lugar de las apariciones del día 2—, sino
que hablamos con Mirjana y la acompañamos desde su casa, todo ese
trayecto, con unos planos de una belleza casi pictórica, en cámara
lenta, de nuestro director de fotografía, Fernando Pérez. Cuando dos
semanas después de aquello Mirjana anunció que había sido la última
aparición del día 2, en las que la Virgen ha venido dando unos mensajes
muy importantes, nos dimos cuenta de que nuestra grabación de ese día se
convirtió en un documento histórico, “para las generaciones venideras”,
y dimos un giro de guión para explicar muy bien qué han sido, y hablo
ya en pasado, esas apariciones que Mirjana ha tenido cada día 2 de mes
desde el año 1987. Han sido 33 años y Gospa Arts estuvo en la última de
todas.


– Usted habla de las apariciones de Medjugorje
como si fuesen ciertas, pero no están reconocidas como ciertas aún por
la Iglesia.


– Yo solo hablo de Medjugorje como el que habla de cualquier otra
cosa, en el sentido de que, efectivamente, puedes no tenerme en cuenta
si no quieres. Mi opinión no es importante y este documental no es ni
una verdad de fe ni un dogma. Es un documental con el simple valor
testimonial. Ellos hablan, yo grabo, investigo, contrasto… y que cada
uno crea lo que quiera sobre ellos. Obviamente, para mí Medjugorje es
un fenómeno, mucho más allá que un lugar físico, que a mí me cambio la
vida. Para empezar.. ¡porque conocí allí a mi mujer!
Pero en este
sentido hablamos también en el documental, como ya lo hice en mi libro:
las apariciones son muy importantes, pero más allá de ellas, que solo
viven seis personas, hay algo mucho más profundo y trascendente: lo
cierto e indiscutible es que son millones de personas —no solo las seis
personas que dicen ver a la Virgen— los que atestiguan vivir una
profunda conversión en Medjugorje, una transformación interior, una llamada a algo nuevo dejando lo viejo a partir de Medjugorje.
Eso es innegable y eso hace de Medjugorje “noticia”. Yo tengo una
importante colección de testimonios de todo el mundo, la verdad. Creo
que Medjugorje es el acontecimiento de la gracia más importante de los
últimos cien años por lo menos. No solo en su “acontecer de Dios”, que
ha habido otros, sino en la respuesta de la gente de cara a Dios. Son
muchos los que han dicho “sí” a la llamada vivida allí.



mirjana– ¿Cuál es esa llamada?


– La conversión. Esto no es nuevo, puedes decir: “Eso pone en el
Evangelio”. La diferencia que se hace en Medjugorje no es la llamada en
sí, sino cómo se da es llamada. Aquí se da una gracia muy especial, muy
particular, intangible, inexplicable, entre muchos peregrinos y Dios.
Eso es así, más allá de todo lo demás. En el documental Mirjana
explica como la Virgen María les explicó un día que cada peregrino que
se hace presente en Medjugorje es cómo si le dijera a ella: “Aquí estoy,
Madre. Ahora dime qué tengo que hacer”
. Y es como si Dios
aprovechase ese ofrecimiento y entrase en la vida de la persona de modo
que esta es consciente de ello, de forma casi tangible, que se nota en
los sentidos porque le emociona, le embarga, le seduce. Para mí es la
descripción que mejor encaja con el testimonio de muchas y muy
diferentes personas sobre qué sucede en Medjugorje y después de ir a
Medjugorje.


– “El mayor acontecimiento de la gracia”… son palabras muy fuertes.


– Bueno, yo soy muy poca cosa y se interpretar nada más que a lo que
llego. En este sentido sí he hecho una reflexión hace años. No son
extraños los días en Medjugorje en que se confiesan en un solo día unas
10.000 personas, tal vez lleguen a 15.000. No es así todos los días del
año, pero sí lo es unos diez días al año.
Hay otros muchos días que
se confiesan 5.000, 3.000… Ves allí a unos 200 o 300 sacerdotes
confesando sin parar durante horas en más de 20 idiomas diferentes.
Tienes que vivir la experiencia de ver aquello, de organizarte para
llevar bolsas con fruta y agua a tu sacerdote conocido porque no le deja
levantarse de allí desde las 11 de la mañana hasta las siete de la
tarde que empieza la Misa. Esto es  así, habitual, desde hace años,
todos los veranos en fechas concretas.Yo esto no lo he visto nunca en
ningún otro sitio. Si dejamos de lado la controversia sobre las
apariciones y solo nos quedamos con esto, con los miles y miles de
personas que se confiesan allí, como en ningún otro lugar hayamos visto,
sí, es un acontecimiento de la gracia incomparable.



confesiones-Medjugorje– ¿Tienen fecha estimada de estreno?


– No. En las circunstancia actuales, sería muy aventurado tratar de
predecir algo. No sabemos ni cuándo ni cómo, ni si será en salas de cine
o un estreno on line… Lo que sí te digo es que teníamos mucho avanzado
y, la verdad, había ganas. Pero como te digo hemos hecho una reflexión,
hemos orado, hemos parado, y hemos preguntado al Señor qué quiere de
nosotros y de este proyecto. La respuesta ha sido muy clara en el
sentido de que no paremos, pero avanzando no en las circunstancias que
nos hubiese gustado, sino en estas, que son las que son.
La semana
pasada abrí la Biblia sin mirar, pidiendo al Señor una palabra, y me
salió un versículo que sonó en mí como un trueno, porque me recordó que,
en realidad, con pandemia o sin pandemia, en todos mis proyectos han
sucedido cosas como estas que parecen una dificultad. Es ahí, en la
dificultad, dónde mejor se ve la mano de Dios. La cita de la que hablo
es del Libro de la Sabiduría, capítulo 11, versículos 1 al 5. Dice así:


“Hizo prosperar sus empresas, bajo la guía un de un profeta santo.
Atravesaron un desierto solitario, plantaron sus tiendas en parajes
intransitables. Hicieron frente a sus enemigos y rechazaron a sus
adversarios. Cuando tuvieron sed, te invocaron. De una roca escarpada se
les dio agua y de una dura piedra, remedio para su sed. Así, lo que
sirvió de castigo para sus enemigos, fue para ellos ayuda en su
necesidad”.


Obviamente donde nos ha hecho “acampar” el Señor ahora es “un paraje
intransitable” para cualquier proyecto, todo se ha detenido, pero este
campamento en paraje intransitable a nosotros nos está abriendo puertas
que, de otro modo, no habríamos conocido nunca; y nos está dando ideas
para un documental de Medjugorje que va a ver un público a partir de la
pandemia, no antes ella, y de verdad que no es lo mismo. Medjugorje
sí es igual antes que ahora, los mensajes no cambian, pero la pandemia
hace muy tangible y cercana, no ajena sino propia, la llamada a la
conversión.
Es tangible, como Medjugorje ha sido tangible para los que lo hemos conocido.



medjugorjeDe todos modos, también le digo que esto no es algo nuevo en mis
proyectos, siempre pasa algo y uno ya va conociendo que los planes del
Señor no son los nuestros. De este modo se rubrica que es su proyecto y
no mis ideas ni la de un grupo de amigos. Si usted supiera el equipo…


– Háblenos de él.


– Para empezar los productores, inversores, benefactores y mecenas
del documental. Personas que prácticamente ni preguntan, solo te dan. Gente
que ante esta situación nos ha llamado y nos ha dicho que, por la
Virgen María y el mensaje de Medjugorje, lo que sea, y que han apoyado
más aún el proyecto.
Se llama Providencia, y es real, es tangible,
sucede y acontece. Me remite de nuevo al pasaje que te he citado del
Libro de la Sabiduría. Cuando peor está todo, a nosotros nos
tranquilizan. De dónde había una roca, brota agua, porque en el corazón
de ellos Dios puso una inquietud generosa de desprendimiento y ellos
dijeron que sí, sin más. Decir lo contrario sería despreciar la
Providencia de Dios. Hay un salmo que dice: “Dios lo da a sus amigos
mientras duermen”. Yo llevo un par de años diciendo mucho que la Biblia
es verdad. Este documental está siendo prueba de ello. Por ello,
aprovecho y pido a todo el mundo que rece por nosotros y este proyecto,
que es muy importante. También si alguien quiere colaborar con su
financiación, puede hacer un donativo a través de Gospa Arts.
Pero antes que oren y pregunten al Señor, hay muchas necesidades ahora y
el Señor provee para todos, si nos dejamos ser provistos por Él.


También quiero hablar de Fernando. Es el director de fotografía y
montador. Es un genio del barroco que ha nacido en nuestra época. Cuando
veas la película, lo entenderás. Me encanta la pintura y sus planos me
recuerdan a cuadros de Zurbarán o José de Ribera. Esas escenas, siendo
estáticas, te emocionan. Pues si les pones un poco de movimiento y
música a cuadros como “Fray Gonzalo”  de Zurbarán, o al “Juicio de
Salomón”, de Ribera… Es un profesional del cine como la copa de un pino,
que vivió dos años en Medjugorje y por lo tanto tiene todos los accesos
y al que no tengo que explicarle mucho. Se leyó mi libro hace años y
nos conocimos el año pasado. Lo puso Dios, ni si quiera había empezado a
buscar montador y director de fotografía y apareció él
. Justo cuando yo le conocí, él acababa un proyecto precisamente en Medjugorje.


En definitiva el grupo de trabajo somos pocas personas pero hemos formado un equipo muy compacto,
que no lo está teniendo fácil, pero es que estamos muy unidos y
convencidos en torno a la Virgen María y su preocupación por todos sus
hijos, el mundo entero.



jesus_garcia_medjugorje_documental– ¿Cómo enfoca usted un proyecto como este?


Con oración primero, con más oración después, y entre tanto, paciencia y perseverancia.
Me apoyo mucho en mucha gente que reza, eso así. Grupos de oración, mi
comunidad de Hermanos del Amor Misericordioso, religiosas y mucha gente
que reza. Luego, cuidando mucho el trabajo. A mis libros les dedico
bastantes meses para escribirlos, entre 10 y 18 meses. Me involucro
incluso en el diseño de las portadas, o de los carteles en caso de un
documental, y quiero contar bien las historias. No busco sencillamente
emocionar como lo puede hacer una telenovela, sino el facilitar un
encuentro con Dios y un cambio de vida. Mi primer documental, Hospitalarios,
tardamos 4 años en hacerlo. Antes de empezar a grabar, viví la
experiencia como voluntario en Lourdes. En esos cuatro años ni te
imaginas la cantidad de cosas que pasaron, pero sí te digo dos cosas:
Que todas las cosas que sucedieron, al principio, me incomodaron, y que,
sin embargo, al final todas ellas mejoraron el producto final.


Otro ejemplo: mi libro El proyecto Magdala trata sobre un descubrimiento arqueológico en Tierra Santa. Me fui allí a excavar tierra y barro antes de escribir. No sabía nada de Arqueología y la respeto profundamente, por eso no quise escribir sobre ella sin conocerla “en persona”.
Ahora sí se lo que cuesta excavar 20 cubos de arena para desenterrar
una moneda o un anzuelo de pescador que llevan 2000 años bajo tierra, y
he vivido esa emoción. Yo la puedo contar. Eso implica tiempo. De hecho,
cuando acabo un texto o un montaje, lo dejo en barbecho un tiempo, y a
ver qué pasa. Dicen que soy muy perfeccionista, pero no es eso: en mis
historias intento darle al mundo lo que yo he recibido, y me exprimo al
máximo buscando las formas, los medios, los testimonios, las músicas…
Cuando yo escribo un libro o un documental, lo hago porque esa historia
ha tenido un profundo y brutal impacto en mí, y porque se que ese
impacto es un regalo que se puede reflejar. Intento que las personas que
lean el libro o vean el documental vivan lo más parecido posible ese
impacto que viví yo. Intento acercarles lo máximo posible a la vivencia
que a mí me ha cambiado, y eso no se hace en dos tardes. Por decirlo de
alguna forma, como me dijo mi buen amigo el dr Jesús Poveda hace ya
muchos años, “la comida rápida te saca de un aprieto, pero a fuego lento
se cuecen las mejores recetas, las que menos engordan y más alimentan”.
Y si es de Dios, Dios proveerá mientras tanto y entonces.


¿Y ha llegado el momento del documental de Medjugorje?


– Sí porque, como te digo, ya he hecho el aprendizaje. No se puede hacer un documental y abarcar Medjugorje habiendo ido allí un par de veces.
Tienes que haber vivido allí, haberlo tocado cada día, haber hablado
con los videntes, por supuesto, pero no solo con ellos: con la cajera
del supermercado, con el taxista, con un peregrino que viene desde la
Tierra del Fuego en Argentina y con otro que viene desde Corea del Sur…
tienes que haber subido a ese monte varias, muchas veces, tú solo, por
la mañana, por tarde y por la noche, lloviendo y con el sol abrasando,
para interiorizar qué mueve a esa personas a subir allí, donde no hay
nada ni nadie esperándoles. ¿O tal vez sí…? Tienes que estar ahí en ese
momento para grabar, vivir o conocer esa respuesta.



padre-jozo– En el trailer que presenta se puede ver al que
era párroco de Medjugorje en 1981, el padre Jozo. ¿qué nos puede
adelantar de él?


– No es ningún misterio, ya le entrevisté para el libro de 2009 y en
otras dos ocasiones para sendos reportajes y él no cambia, siempre dice
lo mismo. Nos hemos encontrado numerosas veces y el padre Jozo no
cambia. Está más mayor y creo que ahora es mucho más prudente que hace
14 años, cuando le conocí, en cuanto a que se cuida mucho de con quien
habla y con quien no. Para mí sí te puedo decir que estamos hablando de
algo muy serio, es un muy buen amigo al que quiero y respeto. Yo con él
suelo callar y escuchar más que hablar. Disfrutamos hablando de las
cosas de Dios y de Medjugorje. Se nota cuando nos encontramos. Él para
mí es como un padre, me dio sus consejos y su ayuda para el documental,
pero sobre todo su confianza. Nos conocemos desde hace mucho tiempo y
ciertamente nos basta una mirada para saber de qué estamos hablando o de
qué no hay que hablar. Hay que respetarle, es un hombre sabio, un hombre de oración y un hombre que ha sufrido mucho.
Hay una parte de la grabación especialmente importante para el
documental, en la que nos abre las puertas de su corazón y su confianza y
así nos lo dice explícitamente.


Él ha sido un aldabonazo, una confirmación de que este proyecto tiene
vida propia, la que le da Dios, y que sea como sea, llegará a término
solo cuándo y cómo Dios quiera. Fue el padre Jozo el que nos dijo y
explicó al pequeño equipo de producción lo importante que es este
documental, con esas mismas palabras
. Nos lo dijo como si él supiese
algo, no se… es un místico. Nos pidió que le fuésemos contando, él
quiere estar encima de este proyecto… Por él se que este proyecto verá
la luz, y que será cuando Dios quiera.


– ¿La pandemia ha cambiado algo de los contenidos del documental sobre Medjugorje?


– En el año 2006 yo fui enviado a Medjugorje a hacer un reportaje.
Aquel viaje cambió mi vida. En el año 2020 ha cambiado la vida de todos.
Por tanto, el documental que estamos haciendo ha cambiado en cuanto al
formato. Del grueso ya teníamos grabado material muy importante. Pero sí ha cambiado la forma de contarlo porque el mundo no es el mismo cuando empezamos a grabar que lo que va a ser cuando se estrene. Va a ser un mundo más fértil para estas historias, no me cabe ninguna duda.
Donde muchos ven un paso atrás yo veo una oportunidad de que la gracia
se manifieste. Y eso es Medjugorje, una manifestación brutal de la
gracia. De hecho, nos hemos planteado partir el documental en partes. No
hacer una serie en el sentido de que cuando acabe la Parte 1 te deje
sin saber cosas. Pero es verdad que meter Medjugorje en 90 minutos era
un problema y esto daría la oportunidad de plantearlo en partes
diferentes, de modo que, como he dicho antes, cosas que no cabían por
metraje han recuperado su verdadero protagonismo. Tú no puedes tener a
una persona que ha visto a la Virgen María y darle solo 8 minutos y
luego “rellenar” con testimonios o recursos, más aún teniendo en cuenta
que solo los videntes son seis.


– Estos proyectos de cine cristiano están
teniendo muy buena respuesta últimamente. ¿Cómo ve la industria en ese
sentido? ¿Hay mercado?


– Ya lo he dicho más veces, que hay mucha gente haciendo cosas muy
buenas con lo que puede. Ahí está Juanma Cotelo; la gente del Hogar de
la Madre con su “Garabandal” y su documental sobre la hermana Claire,
que llevan millones de espectadores. Está Jose María Zavala con sus
documentales del padre Pío y ahora otro sobre Juan Pablo II. Y más gente
que viene haciendo cosas desde atrás desde hace muchos años como Andrés
Garrigó y su Goya Producciones, o Pablo Moreno y sus pelis que son
buenísimas, un cineasta de verdad. Podríamos hablar de la industria o de
un nicho de mercado, lo que pasa que, en ese sentido, no soy la persona
más indicada. Yo esto lo hago porque creo que lo tengo que hacer, no
porque crea que hay un nicho de mercado. Lo hago porque un día en el Evangelio leí la frase: “Id y predicad el Evangelio” y se me clavó en el corazón.
No puedo no hacerlo. Mejor o peor, con mis límites y carencias, que son
muchas más que mis conocimientos o virtudes, pero a mí el Señor no me
pide resultados. Eso me pide que se lo deje a Él.


Puede ayudar y apoyar aquí el documental Medjugorje. La Película

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