IV Domingo de Adviento

CITA

Por eso Dios lo exaltó sobre todo y le concedió

el Nombre-sobre-todo-nombre”

(Flp 2, 9.10).

Nombre superior a todos los nombres”

(Orígenes).

Tesoro de bienes infinitos”

(Crisóstomo).

Preñez de todos los bienes”

(Fray Luis de León).

Maestro Eckhart “Mi suelo y el suelo de Dios son el mismo suelo”

Catecismo, 499: La profundización de la fe en la maternidad virginal ha llevado a la Iglesia a confesar la virginidad real y perpetua de María incluso en el parto del Hijo de Dios hecho hombre. En efecto, el nacimiento de Cristo «lejos de disminuir consagró la integridad virginal» de su madre. La liturgia de la Iglesia celebra a María como la «Aeiparthenos», la «siempre-virgen».

Vaticano II: «La Bienaventurada Virgen avanzó en la peregrinación de la fe y mantuvo fielmente la unión con su Hijo hasta la cruz» y «precedió» a todos los que, mediante la fe, siguen a Cristo. Const. dogm. Lumen gentium sobre la Iglesia, 58. 63.

«Cuando Dios revela hay que prestarle “la obediencia de la fe”, por la que el hombre se confía libre y totalmente a Dios, prestando a Dios revelador el homenaje del entendimiento y de la voluntad y asintiendo voluntariamente a la revelación hecha por él» Const. dogm. Dei Verbum sobre la divina Revelación, 5

San Juan Pablo II, «Llamada a ser la Madre de Dios, María vivió plenamente su maternidad desde el día de la concepción virginal, culminándola en el Calvario a los pies de la Cruz» (Incarnationis Mysterium, 14).

Podemos decir que José ha experimentado tanto el amor a la verdad, es decir, el puro amor de contemplación de la verdad divina que irradiaba de la humanidad de Cristo, como la exigencia del amor, es decir, el puro amor también del servicio, exigido para la protección y el desarrollo de esta misma humanidad. Exhortación Apostólica Redemptoris custos, nn. 25-27.

¡Dejémonos «contaminar» por el silencio de san José! Tenemos necesidad de ello en un mundo a menudo tan ruidoso que no favorece en absoluto el recogimiento y la escucha de la voz de Dios. En este tiempo de preparación a la Navidad, cultivemos el recogimiento interior, para acoger y conservar a Jesús en nuestra vida.

Dios-con-nosotros, el Emmanuel: quien le conoce, conoce a Dios; quien le ve, ve a Dios; quien le sigue, sigue a Dios; quien se une a Él está unido a Dios. En Jesús, nacido en Belén, Dios se apropia la condición humana y se hace accesible, estableciendo una alianza con el hombre

Se puede definir a José un auténtico hombre de fe, como su esposa María. La fe conjuga justicia y oración, y esta es la actitud más adecuada para encontrar al Emmanuel, al “Dios con nosotros”. Ángelus del Domingo 23 de diciembre de 2001

Benedicto XVI a san José, patrono universal de la Iglesia, deseo confiar a todos los pastores, exhortándolos a ofrecer “a los fieles cristianos y al mundo entero la humilde y cotidiana propuesta de las palabras y de los gestos de Cristo” (en la Plaza de San Pedro el domingo 19 de diciembre de 2010)

Papa Francisco: «María es capaz también de hacer saltar un chico en el seno de su madre como escuchamos en el Evangelio. Ella es capaz de darnos la alegría de Jesús. María es fundamentalmente Madre. Bueno sí, Madre es poca cosa, no, María es Reina, es Señora. No. Pará: María es Madre. ¿Por qué? Porque te trajo a Jesús».

«A veces, nosotros quisiéramos tener todo bajo control, pero Él tiene siempre una mirada más amplia. Muchas veces ocurren hechos en nuestra vida cuyo significado no entendemos. Nuestra primera reacción es a menudo de decepción y rebelión. José deja de lado sus razonamientos para dar paso a lo que acontece y, por más misterioso que le parezca, lo acoge, asume la responsabilidad y se reconcilia con su propia historia» Carta apostólica S. José, Patris Corde

«En cada circunstancia de su vida, José supo pronunciar su “fiat”, como María en la Anunciación y Jesús en Getsemaní» Carta apostólica S. José, Patris Corde

San Aelredo de Rielvaux “Emmanuel, que quiere decir ‘Dios con nosotros’”, ¡Sí, Dios con nosotros! Hasta entonces se había dicho “Dios está por encima de nosotros”, “Dios frente a nosotros”, pero hoy es el “Emmanuel”. Hoy es Dios con nosotros en nuestra naturaleza, con nosotros en su gracia; con nosotros en nuestra debilidad, con nosotros en su bondad; con nosotros en nuestra miseria, con nosotros en su misericordia; con nosotros por amor, con nosotros por lazos de familia; con nosotros por su ternura, con nosotros por su compasión… (Sermón para la Anunciación)

P. Raniero Cantalamessa, ¡Podríamos llamarlo «domingo de los nacimientos»!

Karl Rahner, afirma que, en medio de la sociedad secular de nuestros días, “esta experiencia del corazón es la única con la que se puede comprender el mensaje de fe de la Navidad: Dios se ha hecho hombre”.

CONTO

LAS SIETE MARAVILLAS

Un grupo de estudiantes de Geografía, estudiaban las Siete Maravillas del Mundo. Al término de la clase, se les pidió que hicieran una lista de las que ellos consideraban las Siete Maravillas del Mundo, en el día de hoy. A pesar de algunos desacuerdos, la mayoría votó por lo siguiente:

Las pirámides de Egipto…

El Taj Mahal de la india…

El gran cañón de Arizona…

El canal de panamá…

El Empire State de Nueva York…

La Basílica de san Pedro en roma…

La muralla china…

Mientras votaban, el maestro notó que una estudiante permanecía callada y no había entregado aún su lista. Así que le preguntó si tenía algún problema para hacer su elección.

La joven tímidamente respondió: Sí, un poco; no puedo decidirme pues son tantas las maravillas.

El maestro, le dijo:

-Bueno, dinos lo que has escrito, tal vez podamos ayudarte.

-Creo que las Siete Maravillas, más importantes de este mundo son:

Poder tocar…

Poder saborear…

Poder ver…

Poder escuchar…

Poder sentir…

Poder reír…

Poder amar.

Al terminar de leerlas, todos los presentes quedaron en un absoluto silencio, nadie supo qué contestar.

Tomado de Alejandro Illescas

EL SUEÑO DE LA VIRGEN MARÍA

Tuve un sueño, José, y realmente no lo puedo comprender, pero creo que se trataba del nacimiento de nuestro hijo. La gente estaba haciendo preparativos con seis semanas de anticipación, decoraban las casas, compraban ropa nueva, salían de compras muchas veces y adquirían elaborados regalos. Era un tanto extraño, ya que los regalos no eran para nuestro hijo; los envolvían en vistosos papeles y los ataban con preciosos lazos y todo lo colocaban debajo de un árbol. Sí, un árbol José.

Dentro de sus casas, esta gente había decorado el árbol y las ramas estaban llenas de adornos brillantes y había una figura en lo alto del árbol, me parecía que era un ángel, era realmente hermoso. Luego vi una mesa espléndidamente servida, con platillos deliciosos, y muchos vinos, todo se veía exquisito y todos estábamos invitados.

Toda la gente se veía feliz, sonriente y emocionada por los regalos que se intercambiaban unos a otros, pero, sabes José, no quedaba ningún regalo para nuestro hijo, me daba la impresión de que nadie lo conocía porque nunca mencionaron su nombre.

¿No te parece extraño que la gente trabaje y gaste tanto en preparativos para celebrar el cumpleaños de alguien a quien ni siquiera mencionan y que da la impresión de que no lo conocen?

Tuve la extraña sensación de que si nuestro hijo hubiera entrado a esos hogares, para la celebración hubiera sido solamente un intruso. Todo se veía tan hermoso y la gente se veía feliz, pero yo sentía enormes deseos de llorar, porque nuestro hijo era ignorado por casi toda esa gente que lo celebraba.

¡Qué tristeza para Jesús, no ser deseado en su propia fiesta de cumpleaños! Estoy contenta porque solo fue un sueño, pero ¡qué terrible sería si esto se convirtiera en realidad!

Web Católico de Javier

ANÉCDOTA

Hace años leí en un periódico las manifestaciones de una actriz, Jane Fonda. Las he recordado al preparar este punto que acabo de señalar. Decía así: “Yo me arrepiento de dos cosas y una de ellas es la de no haber cuidado de mi vida interior antes. Pero más vale tarde que nunca. Ahora tengo una necesidad de búsqueda espiritual, de rezar, de sentir a Dios en mi hombro. Y en ese camino estoy. Soy una buscadora nata. Para que la vida sea de verdad vida, necesitas saber que creces hasta el final. Si de algo estoy orgullosa es de haber mantenido la curiosidad y la apertura de espíritu toda mi vida”.

Tomado de P. Juan Jáuregui

La palabra ‘almah‘ es un sustantivo que aparece en la versión en hebreo del pasaje de Isaías. Aparece en otros 8 lugares. Se suele traducir como jovencita o doncella. (Vines,Unger, White). Sin embargo en el Cantar 6,8 algunos traducen ‘almah‘ en el sentido de virgen. ‘Almah‘ se suele usar para designar a una doncella no casada. En la venerable versión del Antiguo Testamento en griego, los LXX, se dice parthénos (παρθενος) , esto es, explícitamente virgen. (Kittel V, 826ss.) Aun cuando la palabra puede tener también una variedad de sentidos en el griego, como joven, por ejemplo en Gen 34,3. Los autores de las Escrituras canónicas neotestamentarias suelen citar según la autoridad de los LXX, más que según la versión hebrea. El p. Benoit (en ¿ Está inspirada la versión de los Setenta?) destaca la evolución teológica que se percibe en la versión de los LXX de la que cita San Mateo el pasaje de Isaías, y se pregunta «¿es legítimo preguntarnos si ese progreso en materia dogmática ha podido realizarse sin una intervención especial del Espíritu Santo?» El profeta Isaías, e incluso la misma versión de los LXX, emplean unas palabras que sólo la posterior evolución de la revelación divina, especialmente recogida en el Evangelio según San Mateo, para explicar el «maravilloso acontecimiento» del nacimiento virginal, da un pleno sentido de profecía.

Tomado de deiverbum,org

En la novela “El evangelio de Jesús” de Saramago, el novelista se inventa la biografía de José, muy bella y casi creíble. Un José atormentado por haber salvado sólo la vida de su hijo Jesús y por no haber hecho nada por salvar a los niños inocentes de Belén. Un José que va en busca de su amigo y vecino Ananías que, lleno de celo por el Dios de la Alianza, como tantos otros israelitas se había echado al monte para guerrear contra las legiones del imperialismo romano y defender la soberanía de Dios sobre el país. En su búsqueda, José es confundido con uno de esos guerrilleros y es crucificado en Séforis a los 33 años. El José que, de pasada, nombra el evangelio de Mateo no tiene ni historia ni hazañas, acepta su papel secundario para salvar las apariencias turbadoras.

Tomado de P. Félix Jiménez

CHISTE

Una mujer, al despertarse por la mañana, le dijo a su marido: He tenido un sueño maravilloso. Soñaba que era la víspera de Navidad y que me regalabas un collar de perlas. ¿Qué crees que puede significar ese sueño?

Su marido le contestó: Lo sabrás el día de Navidad.

A la mañana siguiente se dirigió a su marido y le dijo otra vez: Acabo de soñar que me regalabas un collar maravilloso para Navidad. ¿Qué crees que puede significar?

Lo sabrás mañana, le contestó el marido.

Por tercera vez, la mujer se despertó, sonrió a su marido y le dijo: Acabo de soñar que me regalabas un collar de perlas maravilloso. ¿Qué crees que puede significar?

Su marido sonrió y le dijo: Lo sabrás esta noche.

Cuando su marido regresó aquella noche llevaba un paquete envuelto en papel dorado y se lo dio a su mujer. Ésta lo abrió con mucho cuidado y encontró un libro que se titulaba: “El significado de los sueños”.

Tomado de P. Félix Jiménez

CANCIÓN

«Creo, sencillamente, quiero disfrutar de la serenidad del creer.

Desligar el creer del sentir.

Creo, mi Dios y basta, te creo en tus misterios sin entenderlos, te creo en mí y en el pan blanco.

En el prójimo y en la creación.

Sin verte en ningún lado.

Creo, Señor, sencillamente porque creer es confiar y cómo me gusta creerte sintiendo dudas.

Creo, sencillamente. Digo que eres amor.

Escucho que soy tu amado.

No siento y qué más da. Te quiero y eso basta.

Amo, Señor, sencillamente. Porque amar es entregarse.

Y cómo me gusta amarte estando frío.

Espero en tu palabra.

Vivo en tu promesa.

Gozo en ti.

Lo que aún me falta.

Espero Señor, sencillamente.

Porque esperar es descansar.

Y cómo me gusta esperarte sintiendo miedo».

De la canción “Sencillamente” grupo HAKUNA

ORACIÓN

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARIA!

Para que Dios nazca en nosotros sin pedir nada a cambio

y, sea nuestro corazón,

una cálida cuna donde Jesús encuentre cobijo y consuelo.

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARIA!

Para que, en estas horas de santa tensión,

donde el cielo y la tierra juegan a juntarse

podamos también nosotros hambrear

el manjar de Amor que se sirve en Belén.

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARIA!

Queremos que, Tú, seas una puerta

por la que podamos entrar

y disfrutar del Misterio de Dios humanado.

Una puerta que, cuando se abra desde fuera

entendamos y comprendamos

que es Dios quien lo hace desde dentro

que es Dios quien tira desde el cielo.

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARIA!

Para que no vacilemos ni en el amor ni en la fe

Para que nos pongamos en camino hacia Aquel que viene

Para que seamos heraldos de la Buena Noticia

Para que, el Niño que quiere salir de tus entrañas,

encuentre aquí y ahora

hermanos que le amen, le ayuden y le sigan

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARIA!

Para que Dios esté pronto con nosotros

Para que nosotros, pronto estemos con El

Para que creamos, aun sin ver

Para que aún sin ver, creamos por encima de todo

¡DÁNOS TU CONFIANZA, MARÍA!

Sólo así, podremos vivir, celebrar

cantar y festejar el encanto de la Navidad.

Tomado de Javier Leoz

CANTO

Emmanuel Veronica Sanfilippo

CANCIÓN DE ADVENTO E NADAL

Veni, Veni, Emmanuel | Canto de Adviento

Sencillamente Hakuna

Ven Emmanuel – Jésed

Luis de Horna

Delegación para el Clero de Santiago de Compostela