Santo del día

Santa Catalina Tekakwitha
La América Norteamericana también tiene su santa india

Kateri Tekakwitha (1656-1680), laica, india de América del Norte
(Estados Unidos y Canadá), llamada también “lirio de los Mohawks”,
muerta tres años después de su bautismo.


La América norteamericana ya tiene su santa india. Una figura
extraordinaria llena de encanto, testigo de lo que la gracia divina
hace en quien, con toda la inocencia de una juventud incontaminada, se
deja llevar por su impulso.
Kateri Tekakwitha vivió mucho en pocos años. Murió consagrada a Dios a los 24 años.


En el inmenso territorio descubierto en el siglo XVI, se
establecieron poco a poco colonias de todas las procedencias,
ambicionando establecerse en aquellas grandes praderas. En medio de la
presencia holandesa y luego inglesa, vivió una joven india mohawk.


La santa ha realizado muchos milagros privados. La conocida como “el lirio de los mohawks” tiene su santuario nacional en Fonda, Nueva York.
Fue fundado en honor de Kateri, en el lugar donde fue bautizada el
domingo de Pascua, 5 de abril de 1676, y aquí vivió sus años de
adolescencia.


Kateri nació en 1656 de una madre algonquina cristiana –raptada por
los iroqueses y casada con un jefe mohawk–, en la aldea fortificada de
Mohawk Canaouaga u Ossernenon (moderna Auriesville), en el actual estado
de Nueva York.


Cuando sólo tenía cuatro años, quedó huérfana, debido a una epidemia
de viruela. Kateri sobrevivió pero quedó marcada de cicatrices y con una
visión reducida.


Kateri fue apodada “tekakwitha”, que significa “la que choca
contra las cosas”. Fue acogida por su tío, que se oponía duramente a la
evangelización.


Cuando Kateri tenía diez años, en 1666, una partida de guerra
compuesta de soldados franceses e indios hostle de Canadá destruyó las
fortalezas mohawk en la orilla sur del río Mohawk.


Los mohawks supervivientes se trasladaron a la parte norte del río.
Kateri vivió en Caughnawaga, sede del actual santuario, los siguientes
diez años.


Cuando tenía 18 años, inició la catequesis en secreto y
finalmente su tío dio su consentimiento para que se convirtiera al
cristianismo, a condición de saliera del pueblo indio.


Tras caminar unos 320 kilómetros por el bosque llegó a Sault Ste.
Marie, un pueblo cristiano cerca deMontreal, en 1677. El asentamiento
indio conocido como Kahnawake, al otro lado del río San Lorenzo, fue
denominado “El pueblo de los indios que rezan”.


El día de Navidad de 1677, Kateri hizo la primera comunión y, en la fiesta de la Anunciación de 1679, hizo voto de virginidad perpetua. Se ofreció a la Santísima Virgen María para que la aceptara como hija.


En los últimos años de su vida, soportó un gran sufrimiento por una
enfermedad grave. Murió el 17 de abril de 1680, poco antes de cumplir 24
años, y fue enterrada en Kahnawake, Quebec, Canadá. Sus palabras
finales fueron: “Jesús, María, os amo”.


Para saber más, la página de la beata (en inglés): http://www.katerishrine.com/.


Oremos


Concédenos, Señor, un conocimiento profundo y un amor intenso a tu
santo nombre, semejantes a los que diste a Catalina Tekakwitha, para que
así, sirviéndote con sinceridad y lealtad, a ejemplo suyo también
nosotros te agrademos con nuestra fe y con nuestras obras. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo.


Artículo originalmente publicado por evangeliodeldia.org

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