La Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades celebra el Día del Seminario el 19 de marzo bajo el lema “Cerca de Dios y de los hermanos”.
Esta jornada se celebra desde el año 1935 con el objetivo de suscitar
vocaciones sacerdotales mediante la sensibilización, dirigida a toda la
sociedad, y en particular a las comunidades cristianas.
Con este motivo la Comisión episcopal de Seminarios ha editado los
materiales para preparar su celebración. Se trata de un Subsidio
litúrgico, una Catequesis para adultos y otra Catequesis para niños,
adolescentes y jóvenes. Tampoco falta una Reflexión teológica
Pastoral, de la que ofrecemos, a continuación, unos extractos.
Cerca de Dios
“La vida cristiana no es ordenar la vida al modo de Dios desde lo que
a mi me parece, es una relación con una persona viva, es una existencia
iluminada con la riqueza de Dios.”
“Cuando el amor es real, la persona gozosamente ata su libertad al
otro para que se mantenga viva esa relación; no se puede amar sin hacer
una entrega de sí mismo, sin hacer una oblación de su libertad por la
fuerza del amor. El valor supremo del hombre no es la libertad, sino la
libertad al servicio del amor.”
“El Señor nos invita al banquete de la vida pero sin que nos
desinteresemos de Él, sin que le presentemos la espalda: la espalda a
Dios siempre trae muerte para el hombre.”
Cerca de los hermanos
“La vida de Cristo, el amor de Dios, no puede ser un elemento
marginal en nuestra vida; porque quiere decir que entonces no hemos
entendido el amor de Dios.”
“La felicidad del hombre no se puede plantear con los criterios del
mundo sino con los criterios de Dios, no se puede enfocar con el egoísmo
sino con una sincera y auténtica relación de amor hacia los hermanos.”
“No hemos de tener miedo de abrirnos a la presencia de Dios y en la
entrega a los hermanos. Que no nos dé miedo que nos conozcan cómo somos,
a veces nos frena y nos retiene en la entrega la impresión de que si
nos conocen como somos, no nos amarán, no nos podrán estimar. Él nos
conoce, Él nos ha amado y nos ama hasta el extremo.”
El amor cordial auténtico es siembra fecunda y duradera en el mundo
“Hay que ser instrumento de la mirada de Dios, de la sonrisa y del
amor de Dios hacia todos, poniendo amor en lo que hacemos y sirviendo
como expresión de la manifestación de la caridad de Dios.”
“El cristiano se caracteriza por participar de una realidad nueva; no
a través del pesimismo ni con la amargura, sino por una mirada de
aprecio cordial. Lo importante es elevar la visión de las cosas.”
“La madurez de la vida cristiana consiste en aprender a mirar a cada
persona desde el Corazón de Dios con una continuada simpatía a todo lo
creado.”
AgenciaSIC