El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, presidió los actos con los que agentes, voluntarios y técnicos de Cáritas Diocesana de Santiago de Compostela celebraron el tiempo de Navidad. Durante su intervención en la Misa el prelado, que estuvo acompañado del delegado episcopal de Cáritas, Jesús García Vázquez, agradeció a todo el mundo el trabajo diario que desarrollan a lo largo del año a favor de las personas más necesitadas. Insistió en que “Cáritas es la clave a través de la que tenemos que interpretar el ser y el acontecer de la vida de cada uno de nosotros”.
Monseñor Barrio habló de la labor del cristiano, el tiempo de Navidad y la figura de San José, “que es un ejemplo para todos nosotros”. Pidió a agentes y técnicos de la institución que vivan el amor directamente “en la realidad de Cáritas, para de este modo seguir situados en la clave del amor hacia las personas más necesitadas”.
Intenso trabajo
El director de Cáritas, José Anuncio Mouriño Rañó, agradeció a agentes y voluntarios el intenso trabajo desarrollado a lo largo del año y les animó a que todos juntos “podamos seguir haciendo cosas que ayuden a las personas que peor lo están pasando”. El equipo encabezado por el doctor Manuel Gelabert, que se encarga del sillón solidario en odontología, se sumó a la jornada navideña haciendo un alto en el camino de atención de los pacientes que acuden los fines de semana al consultorio odontológico. El arzobispo les agradeció la gran labor sanitaria que llevan a cabo “de ayuda a tantas personas necesitadas y faltas de recursos”.
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