Roma da el visto bueno a la experiencia espiritual de Medjugorje y la Reina de la Paz

El Vaticano no se pronuncia sobre la sobrenaturalidad de sus mensajes o apariciones

El Vaticano aprueba con un nihil obstat (“nada impide”) la devoción internacional a María como Reina de la Paz, las peregrinaciones a Medjugorje, en Bosnia-Hercegovina, y el uso espiritual de una selección semi-oficial de mensajes, que deben considerarse “textos espirituales edificantes”. Lo hace en su documento La Reina de la Paz.

Pero las apariciones siguen siendo “presuntas apariciones”, igual que los mensajes, y Doctrina de la Fe no entra en si pasó algo sobrenatural en Medjugorje o si sigue sucediendo.

Más aún, al presentar el dictamen vaticano ante los periodistas, el cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto de Doctrina de la Fe, detalló: “Pregunté al Papa, porque él podía decir que después de este Nihil Obstat seguiríamos [hacia una declaración de sobrenaturalidad]. Pero me dijo: para nada, considero esto suficiente, no iremos más allá hacia una declaración de sobrenaturalidad. Me dijo que le parecería muy difícil. Una cosa es decir: ‘pueden rezar a la Virgen de la Paz, hacer peregrinaciones y leer sin peligros estos mensajes. Eso, para el Papa, es suficiente”, explicó en respuesta a las preguntas de periodistas.

El cardenal Fernández mostró un libro con una selección de mensajes recopilados, transmitidos por los supuestos videntes. “Estos mensajes los hemos analizado, distinguiendo su lenguaje, conectándolos. Los mensajes que vengan después, no sabemos. Pero los que lleguen, los podrá analizar el visitador y cada dos meses se podría publicar. Si hay algo dudoso, nos llamará y trataremos de contestar, no en dos años, sino en una semana”, añadió el cardenal argentino.

“No estamos seguros que sean mensajes de la Virgen”

“No estamos seguros de que sean mensajes de la Virgen”, detalló antes el cardenal Fernández, “y los acogemos solo como textos edificantes que pueden estimular una bella experiencia espiritual”.

¿Por qué Roma no da más apoyo a los supuestos mensajes de Medjugorje? Fernández fue muy claro: “si digo que son sobrenaturales y que los dijo la Virgen serían más importantes que las obras de Teresa de Ávila. Por eso es tan difícil [declarar la sobrenaturalidad]. ¿Desde 1980 hasta hoy, cuantas declaraciones de sobrenaturalidad hubo? Sólo tres o cuatro, y ni siquiera estamos seguros, porque usan palabras como ‘la Virgen nos ha visitado’, que hay que ver qué significa eso. En cambio, ¿cuántas beatificaciones desde 1980? Pregunté al cardenal Semeraro [de Causa de los Santos] y me dijo que 3.159. ¿Por qué hay tantas beatificaciones y tan pocas declaraciones de sobrenaturalidad? Porque es muy difícil”.

En la rueda de prensa el cardenal Fernández insistió en que lo que da Roma es una “autorización al culto público a María Reina de la Paz, no una declaración de sobrenaturalidad”.

“El Espíritu hace cosas buenas en medio”

“Digo que el Espíritu Santo hace cosas buenas en medio de ese fenómeno. Para eso no necesitamos certeza moral. Seguiremos hablando de ‘presuntos’ hechos sobrenaturales, y decimos que el Espíritu obra en medio de peregrinaciones y de acciones pastorales en la devoción a la Reina de la Paz“, añadió.

“La Iglesia expresa, aprobando el culto público a María Reina de la Paz, que no quiere dejar solos a estos fieles. Mientras no se aprueben los mensajes, sólo se aconseja a los fieles considerarlos como “textos edificantes”. Y se da autoridad al visitador vaticano en Medjugorje para trabajar en conexión con Doctrina de la Fe. Sería imprudente presentar los mensajes como llegados del Cielo. Alguien dirá: ¿pero es posible guardar silencio sobre algo que piensas que la Virgen comunicó? Pues sí, como se hizo con los secretos de Fátima.”

La rueda de prensa duró dos horas y el cardenal la presentó como “explicaciones que pueden ayudar a comprender mejor el significado de la decisión tomada”, sin ser documento oficial eclesial (el documento oficial es el titulado La Reina de la Paz, aquí completo).

Una investigación sin entrevistar a los videntes

El cardenal Fernández respondió a preguntas de los periodistas que su equipo, al preparar este documento, no ha hablado con ninguno de los seis supuestos videntes implicados, sino que se ha basado en las entrevistas y trabajos recopilados por comisión Ruini, presentados en 2017, que investigó el caso por encargo de Benedicto XVI.

“No hemos hablado con ellos, pero les he escrito una breve carta con algunas sugerencias, es una carta reservada que conoce el visitador”, dijo, refiriéndose a Aldo Cavalli, visitador apostólico al que el Papa encarga la supervisión espiritual de Medjugorje.

El cardenal Fernández expone el documento sobre Medjugorje del dicasterio de Doctrina de la Fe

Un análisis de las investigaciones previas

El cardenal Fernández ha querido defender la buena fe de casi todos los implicados en la ya larga historia de Medjugorje. “Conocemos la opinión negativa del obispo emérito de Mostar sobre los hechos de Medjugorje, él tenía el derecho y deber investigar y pronunciarse. El episcopado de Yugoslavia hizo su comisión de estudio, la Declaración de Zadar, que hablaba de que lo investigado ‘hasta ahora’ no permitía hablar de lo sobrenatural. Benedicto XVI creó la comisión internacional, la Comisión Ruini, que consideraba que en las 7 primeras apariciones los muchachos, mentalmente sanos, no se dejaron influenciar por nadie y testificaron haber visto a la Virgen, que daba mensajes de penitencia”, detalló Fernández.

“Según votó esa Comisión Ruini, 13 de 15 miembros consideran que esas 7 primeras apariciones son sobrenaturales. Sobre las apariciones posteriores sólo 2 consideraron que no eran sobrenaturales, el resto votaron con ‘no podemos aún discernir’. Sobre los efectos, 11 los veían positivos y sólo 3 hablaban de “efectos mixtos”. En 5 o 6 diócesis se produjeron problemas importantes con grupos ligados a Medjugorje, por esta razón algunos hablan de frutos mixtos, detalló el cardenal. Fernández repitió que el informe Ruini es “muy, muy bueno”.

Fernández admitió que varios testigos orales confirman que Juan Pablo II tenía buena opinión de Medjugorje, o al menos un fuerte interés. Pero el cardenal argentino insistió en que Benedicto XVI pedía separar el aspecto de si las apariciones fueron sobrenaturales y reales, del aspecto de los frutos y la devoción que genera, con sus peregrinaciones.

“El problema no es la hipercrítica moderna, sino evaluar la ortodoxia y vitalidad de la vida religiosa que se desarrolla alrededor de esos lugares”, escribió el cardenal Ratzinger, según cita Fernández, que adopta ese criterio en sus normas. “¿Hay vitalidad, fe, conversión, frutos positivos, se ve que Dios hace cosas buenas? No decimos “a causa de ” sino “alrededor o en medio de”. Ese criterio del cardenal Ratzinger es el mismo que usa Francisco y es el que se aplica en las normas”. Francisco dijo que “el meollo del informe es el hecho pastoral, las personas que van y cambian de vida”.

Detalló después que el primer visitador enviado por Francisco, Hozer, viviendo en Medjugorje un tiempo, hizo un informe con conclusiones aún más positivas que el Informe Ruini.

Aldo Cavalli, actual visitador, que vive allí, prefiere no opinar de los mensajes, pero sí tiene opinión positiva de los frutos. “Me dijo que es un oasis de paz y de fe donde Dios, a través de la Reina de la Paz, hace mucho, mucho bien”, dijo Fernández.

“Los Pontífices muestran un gran respeto ante una devoción muy extendida en el Pueblo de Dios: en eso nos detenemos, más que en el origen sobrenatural o no del fenómeno. Los fieles están autorizados a dar su adhesión de manera prudente y se autoriza el culto público a María Reina de la Paz. Por estas experiencias, y no a causa de los supuestos fenómenos, se han producido efectos positivos. Sí, hubo problemas, pero esos efectos problemáticos no se extendieron por el pueblo de Dios”, añadió.

El nihil obstat lo da el obispo local

Ese nihil obstat a la devoción y peregrinación lo dará el obispo local, por indicación de Roma. “Se quiere seguir con la tradición del decreto del obispo local con su nihil obstat. El decreto es del obispo, pero el Dicasterio interviene en diálogo con el obispo, por su dimensión mundial. El obispo explicita que los sacerdotes de su diócesis son libres de adherirse, o no, a la experiencia de Medjugorje. Pero la devoción a la Reina de la Paz se ha extendido por el mundo, hay grupos en todo el mundo y obras de caridad”.

Fernández explicó lo que cree que atrae más en todo el mundo a quienes quizá ni saben nada de Medjugorje como lugar: “Es un fenómeno popular que no tiene muy en cuenta los mensajes o las discusiones sobre los videntes, sino que lo que atrae es la Reina de la Paz, su presencia que da paz. Yo vi la imagen de la Reina de la Paz en pueblos en América. Propuse a unos fieles hacer edículos de la Virgen y la primera que me propusieron fue la Reina de la Paz”.

De los mensajes, destacó que suelen animar a la fe y la construcción de la paz. Sobre los mensajes poco exactos dice que usan “lenguaje popular, no teológico”. Por ejemplo, cuando dicen que “los difuntos se alegran cuando ofrecen misa por ellos”. Un teólogo puede decir “no hay alegría en el Purgatorio” o “hay difuntos condenados que no se benefician”. Pero somos católicos y sí, ofrecemos misas por difuntos”.

Continuó: “Estos mensajes no son un dictado, la persona escucha y se esfuerza por recordarlo y expresarlo, no se debe leer como un texto de magisterio o catecismo y buscar su mensaje profundo tras la imperfección de las palabras. Y que el Espíritu Santo actúe en una experiencia no significa que todo en esa experiencia esté libre de toda imperfección”.

¿Por qué leer estos mensajes poco precisos habiendo textos doctrinales más precisos?, planteó el cardenal saliendo al encuentro de una objeción razonable.

“Si hiciéramos eso, no quedaría mucho por leer. Quedarían solo unos pocos textos muy precisos, se prohibirían textos de San Juan de la Cruz, a quien admiro, por su Llama de amor viva, que habla del “centro infinito de la sustancia del alma”. Es un problema: ¿es infinito el centro del alma? Y luego dice, más problemático: “el centro del alma es Dios”. ¿Es esto un lenguaje preciso, que no causa confusión? O la expresión de Santa Teresita: ‘no confío en mis méritos, que no los tengo, Él, cubriéndome con sus méritos, me hará santa’. ¿Este lenguaje es luterano?” El cardenal mencionó un par de textos de Trento sobre los méritos que chocarían con lo de Teresita. “No han faltado fanáticos que han propuesto prohibir a los fieles estos autores espirituales, ¡y eso que San Juan de la Cruz y Teresita se formaron en un convento! Pero es que el lenguaje místico busca fomentar el deseo de confiarse en Dios”, insistió Fernández. Ese lenguaje, dijo, es más eficaz para ese fin que la Summa Teológica (el gran tratado medieval de Santo Tomás de Aquino, muy preciso).

Las enseñanzas de Medjugorje

La nota además pide “acoger y evaluar” los mensajes con una visión de conjunto. Más que los detalles lo que importa son las grandes exhortaciones de los mensajes. La primera, la propuesta de paz, que se transmite con la figura de la Reina de la Paz. También se valora el amor a las personas de otras denominaciones: “todos sois mis hijos, musulmanes, ortodoxos, católicos”, dicen los mensajes, lo que no significa que todas las religiones sean iguales ante Dios, no hay sincretismo ni relativismo, pero sí que todos los hombres son amados por Dios. ¿Cómo no pedir la paz entre religiones en el contexto de una guerra marcada por las identidades religiosas?

Hoy os invito a la conversión, este es el mensaje más importante que os he dado”, insiste en sus mensajes. Y exhorta a luchar contra el mal, no dejarse intimidar por las pruebas. “Habéis permitido, sin daros cuenta, que Satanás se apodere de vosotros, no cedáis”, dice otro mensaje citado por Fernández.

El cardenal argentino valora la invitación a la oración unida al amor fraterno. “Se os pide amar y dar”, cita el cardenal. No es una devoción privada cerrada al mundo, sino abierta a hacer apostolado y salir al mundo, detalló.

Fernández siguió repasando objeciones. ¿Cuánto viene de Dios y cuanto de otras fuentes, deseos, cultura, etc…? “También pasa en la Biblia, hay que discernir lo que es cultura y lo que es el mensaje divino?

Objeciones hechas a Medjugorje

¿Cuáles serían entonces los puntos débiles de los mensajes de Medjugorje?

Para algunos, la frecuencia, su insistencia en escucharm exhortar… “Cansa, ¿no?”, dice el cardenal. Y que hable de “mis planes”, de la Virgen, como si fueran distintos a los de Dios.

Y “hay un riesgo, es cierto, de tener dependencia de los mensajes de la Virgen”. Pero hay mensajes de Medjugorje que advierten de ese mismo riesgo. “No vayáis en busca de cosas extraordinarias, tomad el Evangelio, leedlo y todo os resultará claro”, dice otro mensaje. Y también: “¿Por qué hacéis tantas preguntas? Las respuestas están en el Evangelio”.

Esa insistencia se hace problemática en mensajes “más privados” con fechas, lugares y aspectos concretos, que “hay que discernirlas en comunidad, el párroco con el consejo pastoral, la Virgen no tiene que decirnos a qué hora celebrar la misa”.

“Ese es el modelo de Virgen cartera que el papa Francisco rechaza. O cuando dice qué día hay que celebrar el nacimiento de María. Gracias a Dios ese tipo de mensajes no son frecuentes y muchos no han sido publicados. Se explican sólo por los deseos personales de los videntes. Se mezclan elementos edificantes y otros problemáticos”.

La vida de los videntes ¡no requiere ser ejemplar!

Al inicio del pontificado de Francisco, Doctrina de la Fe se manifestó muy contrario a Medjugorje, incluso hablando de lo demoníaco (una alusión, parece, al cardenal Müller). “Algunos dijeron que la vida de los muchachos no era ejemplar, poniendo como ejemplo que una niña fumaba, quizá robando cigarrillos a su padre. Eso se ha tomado una y otra vez como argumentación. O que reconocieron haber mentido dos veces, una para no difundir un mensaje privado, otra por petición del padre Vlasic. Otros señalan que no tienen virtudes heroicas, pero las personas que reciben mensajes o dones carismáticos no necesitan tener virtudes heroicas”. Se necesitan para las beatificaciones, no para reconocer mensajes.

Y añadió: “Incluso si hubiera reconocimiento de algo sobrenatural en un fenómeno, eso no dice nada de la santidad del vidente. Si una persona tiene un carisma, por ejemplo de sanación, aunque caiga en pecado, la persona sigue sanando. Otra cosa es que la Iglesia prohíba el ejercicio por riesgo de escándalo”.

Otra crítica: que ningún vidente se hizo monje o monja. Pero no tenían por qué.

O la acusación de que la Virgen supuestamente diga que todas las religiones sean iguales. Fernández considera que dice que son los hombres (de distintas religiones) los que son iguales ante Dios.

Otra acusación: que había sacerdotes pecadores, como el padre Vlasic, alrededor de los muchachos en los inicios. Pero no era su director espiritual, detalla Fernández. De hecho, hay quien los acusa de lo contrario: de no tener dirección espiritual. Los chicos estaban solos en las primeras apariciones, no estaban apegados a Vlasic, y las primeras apariciones sucedieron cuando no había sacerdote en el pueblo.

“El punto más oscuro y triste es el largo conflicto entre los franciscanos rebeldes y los obispos”, admitió el cardenal, “algo que empezó antes de Medjugorje, en 1975, cuando Roma pide a los frailes dejar el lugar a los diocesanos. Los franciscanos rebeldes, que son un verdadero problema, no están relacionados con Medjugorje, según me confirman el obispo de Mostar y el visitador apostólico”. Por eso, insiste, “el nihil obstat a María Reina de la Paz no es en absoluto una victoria de los franciscanos rebeldes que se colocaron fuera de la Iglesia y están en una situación realmente fea”.

Más pegas: “hay rumores en redes de que una vidente compró un edificio entero muy caro”. La realidad es que solo compró su piso, dice el cardenal.

“Sí, los videntes podrían y pueden pecar. Podrían pecar en el futuro, sí, pero eso no hace que las cosas buenas de Medjugorje se hagan demoníacas. El culto público a María Reina de la Paz se seguirá produciendo. Si hubiera escándalo, intervendría el obispo, el visitador y el Dicasterio. Este nihil obstat no soluciona todo para el futuro. Los supuestos videntes son personas casadas, con hijos, sujetos a tentaciones como todos”, admite el prefecto.

Luego recuerda un importante criterio bíblico: San Pablo en 1 Corintios 14 dice que “los espíritus de los profetas están sometidos a los profetas”, es decir, que los carismas que da Dios están sometidos al discernimiento del profeta. El mismo San Pablo consultó a los otros apóstoles en Jerusalén. “La Virgen no nos usa como títeres, deja espacio a nuestro discernimiento eclesial. No es una Virgen cartera, como dice el Papa Francisco”.

El cardenal valoró también que muchos mensajes animan a pensar en el Paraíso y a buscar ir al Cielo, a recordar que somos peregrinos hacia la Vida Eterna. “Dios, en medio de las imperfecciones humanas, ha encontrado en Medjugorje un río de bien y belleza”, dijo el cardenal para finalizar su ponencia ante la prensa.

Algunos números

El periodista Andrea Tornielli, de la Sala de Prensa vaticana, quiso dar algunos números sobre el fenómeno: más de 1 millón de sacerdotes han pasado por Medjugorje desde 1986 y han celebrado misa (matiza que un sacerdote que vaya varias veces cuenta como varios); sólo en agosto de 2024 se repartieron 325.000 comuniones, con 9.500 sacerdotes pasando por allí ese mes. Un estudio sociológico italiano llamado ‘Mi vida ha cambiado en Medjugorje’, analiza mil cuestionarios de peregrinos de Milán: el 38% dice que busca consuelo espiritual, un 23% pide gracia, un 17% por necesitar contacto con lo sagrado; casi un 49% repetía la visita,

Cuando Tornielli estuvo allí, cuenta, le asombró la cantidad de gente en la adoración eucarística, y conoció a gente que vivió la guerra, perdió familiares, pero gracias Medjugorje podían expresar perdón y paz. “Consideré que allí pasaba algo bueno”.

A preguntas de los periodistas, el cardenal Fernández añadió que “la relación con los videntes no está prohibida, pero no es aconsejable, tampoco para ellos. Hubo una época que todos los sacerdotes querían hablar con ellos, y era una persecución para ellos. Incluso una de ellas tuvo un trastorno psicológico, ¿quién no lo tendría? Pero los mismos mensajes nos piden no centrarnos en los videntes, sino rezar a la Reina de la Paz”.

También a preguntas de la prensa, Fernández comentó su experiencia: “Yo estuve en Medjugorje hace años con dos amigos sacerdotes, uno tenía la fijación de ir, yo hubiera preferido ir a Florencia o Venecia. Conseguimos llegar en autobús. Me encontré lo que dice el visitador: entorno de oración, paz, deseo de cambiar de vida… Aquel sacerdote quería hablar con una vidente, habló con su mamá en su casa, pero al final nos pusimos a rezar y nos hizo mucho bien”.

El cardenal Fernández acabó con una oración a la Virgen pidiendo por la paz en las familias, en el corazón de los hombres y en el mundo, reforzando su advocación de Reina de la Paz.

La rueda de prensa de 2 horas sobre Medjugorje y el documento Reina de la Paz:

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