Papá y mamá mueren por Covid-19, papa Francisco consuela al hijo

“No olvidamos a las víctimas del coronavirus”. Desde la provincia italiana más golpeada por la pandemia, Bergamo, el papa Francisco recibió una carta muy emotiva a la cual respondió de inmediato

Carlo Chiodi, 50 años, un camionista de Carobbio degli Angeli, provincia de Bergamo, Italia, ha perdido a sus padres ancianos durante la pandemia. El papa Francisco le invitó a visitarlo a casa Santa Marta en el Vaticano junto a su familia. 

Después de la misa, Francisco le dedicó varios minutos a la familia Chiodi el domingo pasado en privado en una sala de la residencia donde vive, antes del ángelus, en el que mencionó en público el dolor de las personas que no se pudieron despedir de sus seres queridos durante la pandemia.

No olvidamos a las víctimas del coronavirus. Esta mañana he escuchado el testimonio de una familia que ha perdido a los abuelos sin poder despedirlos, en el mismo día. Mucho sufrimiento, muchas personas han perdido la vida, víctimas de la enfermedad; y muchos voluntarios, médicos, enfermeros, monjas, sacerdotes, que también han perdido la vida”, dijo el Papa después del ángelus.

Asimismo, saludó ante el público de fieles y peregrinos al grupo de familias de Carobbio degli Angeli, que han venido en peregrinación en recuerdo de las víctimas del Coronavirus

El Papa «me dijo que el llanto y la ira son humanos, que enojarse es normal y que es una forma de oración cuando estás solo y sientes dolor. Continuó diciendo que contenerse y convencerse de no sufrir no es la solución, hay que liberarse de las cargas que afligen al corazón”, declaró Carlo Chiodi al diario italiano L’Eco di Bergamo

«Admitió que sentía el dolor del mundo dentro de sí mismo y que rezaba todos los días a Dios para entender el significado de este sufrimiento. Durante la audiencia temblábamos, estábamos abiertos a la humanidad del Papa”, concluyó. 

Aleteia