Con la llegada del mes de julio, la organización de divulgadores del arte y la fe cristiana, Nártex, prepara uno de sus proyectos estrella del año, los proyectos de verano. Isabel Fernández Abad, presidenta de la asociación, cuenta a Religión en Libertad todos los detalles de esta iniciativa que tendrá lugar en Madrid entre el 20 de julio y el 4 de agosto con un objetivo: poner en valor “la trascendencia, el significado cristiano y el mensaje de la salvación” presentes en el arte sacro por todo el mundo.
Durante estos días, los voluntarios de Nártex se ponen a disposición de los turistas en los principales monumentos europeos -como Santa María del Fiore de Venecia o Notre Dame de París- para ofrecer “acogida” a los visitantes y, sobre todo, “una visita guiada desde la fe”.
“Se trata de poner en valor el patrimonio que hay en iglesias y catedrales desde un enfoque creyente“, explica.
Durante estos días, los voluntarios, cristianos de diversas nacionalidades, “viven, rezan y trabajan juntos en destinos tan sugerentes como Venecia, Francia, Alemania o Inglaterra”.
Este año, los proyectos tendrán lugar en Torreciudad y en Madrid, de modo que los interesados podrán, simplemente con asistir en los horarios indicados, profundizar en las grandes motivaciones religiosas que llevaron a alzar los monumentos de San Ginés, la Basílica de San Miguel o la Colegiata de San Isidro.
“Sin la fe, nada tiene sentido”
Los miembros de Nártex son conscientes de que cada vez más el arte sacro se contempla desligado de su raíz cristiana. Por ello, en su caso, la fe “lo es todo” a la hora de realizar su trabajo y sin ella, “nada tiene sentido”.
“Es la fe la que ilumina el arte cristiano, no solo en las iglesias y catedrales. Es a la fe a la que responden esas grandísimas manifestaciones de nuestra historia del arte, y la razón de ser de la asociación en sí misma”, explica.
Sin embargo, “la trascendencia” o el profundo “mensaje de fe del arte cristiano” son aspectos que “se obvian cada vez con más frecuencia en favor de datos, fechas y técnicas que muchas veces son irrelevantes”.
El leitmotiv de Nártex es recuperarlo. “Tratamos de ponerlo en valor”, y para ello “entra en juego la fe de los guías, que normalmente son personas que tienen una fe muy vivida y eso ilumina el mensaje que van a contar después. El turista puede tener o no tener fe, pero habitualmente se recibe muy bien el servicio y la información y se crea un clima muy agradable en las iglesias”, explica.
El Señor actúa, también desde el arte y la belleza
Se trata, en definitiva, se tenga o no se tenga fe, de transmitir la acogida y “confiar en que el Señor actúa. ¿Quién no es capaz de conmoverse delante del transparente de la catedral de Toledo por muy poca fe que tenga? Aunque solamente sea por la maravilla artística, ahí también está el Señor y eso también es una llamada de atención a tu corazón, aunque no seas creyente”.
Muestra de ello son las Horas de arte y oración convocadas por Nártex. Consiste en la reunión de guías, voluntarios y visitantes que, ante el Santísimo expuesto, meditan rodeados del arte sacro que rodea el altar o incluso el espacio en sí mismo. “A través de meditaciones, alternamos momentos en silencio y de música sacra elegida al efecto por la temática, la época o el instrumento”, explica. De este modo, a nivel cultual, se busca que “el espacio cobre un sentido y a ello se añade una alabanza bonita al Señor“.
Preguntada por las modalidades de asistencia y colaboración, menciona la posibilidad de inscribirse como voluntarios que deseen recibir formación y, una vez preparados, puedan dirigir las visitas. Los interesados también pueden solicitar visitas y, si desean comprometerse, formar parte de Nártex como socios.
“Lo que más nos gusta es que la gente participe de nuestras actividades y que esté dispuesta a fascinarse y comprometerse con el proyecto, que siempre hace falta un poco de relevo”, concluye.
Puedes ayudar a Nártex a llevar la fe a través del arte pinchando aquí.
Los guías de Nártex estarán disponibles en los siguientes puntos y horas entre el 20 de julio y el 4 de agosto. No será necesaria cita previa, solo llegar a los monumentos dentro del siguiente horario:
San Ginés: de 10:00 a 13:00 horas.
Basílica de San Miguel: de 18:00 a 20:00 horas.
Colegiata de San Isidro: de 10:00 a 13:00 y de 18:00 a 20:00 horas.
Las visitas guiadas podrán seguirse en español, catalán, inglés, italiano y alemán.