La reina emérita doña Sofía inauguró este lunes una nueva edición de Las Edades del Hombre,
ya un referente nacional e internacional sobre la excelencia y la
riqueza del patrimonio religioso procedente de las distintas diócesis de
Castilla y León. En las 21 ediciones que se han desarrollado ha sido visitada por 11 millones de personas.
En esta ocasión, la sede elegida ha sido la localidad segoviana de Cuéllar, en cuyas iglesias se expondrán las cerca de cien obras de arte llegadas de toda la región.
Reconciliare, título de esta edición
El título de la exposición será Reconciliare. En la presentación, el obispo de Segovia, César Franco, dijo que estaba palabra que da nombre a Las Edades del Hombre
“evoca una necesidad urgente en nuestra época lacerada por divisiones,
guerras y odios fratricidas y la terrible lacra del terrorismo”.
Esta exposición se compone de piezas que van del siglo XIII al XXI de
autores como Pedro y Alonso Berruguete, El Greco, Luis Salvador Carmona,
Fernando Gallego, Felipe Bigarny, Alejo de Vahía, Juan de Juni, Manuel
Pereira, Gil de Siloé, Ambrosius Benson o Julio López.
La idea de la “reconciliación” surgió en torno al descubrimiento
de unas bulas del siglo XVI que se llevó a su tumba Isabel de Zuazo en las que los organizadores han entendido que trataba de buscar la reconciliación de su alma.
La localidad segoviana de Cuéllar albergará este año la muestra de
Las Edades del Hombre; cuenta con unos 9.000 habitantes y está a mitad
de camino entre Valladolid y Segovia
La muestra, dividida en tres iglesias
La exposición está dividida en un preámbulo y cuatro capítulos. Comienza
en la Iglesia de San Andrés, con el prólogo y el capitulo I, compuesta
por 36 obras. En la de San Martín se desarrollan los capítulos II y III,
con 39 piezas. Y en la iglesia de San Esteban, el IV, que se desarrolla
con 21 obras.
Tal y como informa ABC, la iglesia de San Andrés posee tres naves y crucero con tres ábsides y se tiene conocimiento de que ya estaba construida en 1277. El retablo mayor lo preside San Andrés, alrededor del cual se distribuyen pinturas de santos.
En el templo se pueden contemplar retablos, en su mayoría barrocos, que
albergan pinturas y tallas de una interesante factura. Muchas de estas
imágenes proceden de otras iglesias, destacando la imagen de la Virgen
de la Rochela o el Cristo de San Gil, entre otros. Posee una importante colección de tallas, entre las que destaca un calvario del gótico primitivo.
Por su parte, la iglesia de San Martín, situada junto al castillo, fue declarada Monumento Artístico Nacional en 1931 y es una de las mejores muestras de la arquitectura mudéjar de la villa. En la actualidad alberga el Centro de Interpretación del Arte Mudéjar.
Por último, la iglesia de San Esteban fue declarada Monumento Artístico Nacional en 1931 y se tiene constancia de su existencia ya en el año 1247, cuando era la iglesia de los hijosdalgo, custodiando el archivo de la “Cofradía de la Cruz”.
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