Al concluir este domingo el rezo del Ángelus, Francisco anunció el nombramiento de 13 nuevos cardenales, 9 electores y 4 que, al haber cumplido más de 80 años, no participarían en un eventual cónclave. Entre estos últimos, el capuchino Raniero Cantalamessa, quien ha sido predicador de la Casa Pontificia desde 1980.
Uno de los designados es el español Celestino Aós, navarro actualmente arzobispo de Santiago de Chile.
Otro nombramiento relevantes es el de Marcelo Semeraro, quien lo habría sido antes o después al ser designado recientemente prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos tras la renuncia del cardenal Angelo Becciu, involucrado en una investigación sobre uso de los fondos de la Secretaría de Estado.
El consistorio para imponerles el capelo tendrá lugar el 28 de noviembre.
Los designados electores son:
Mario Grech, secretario general del Sínodo de los Obispos;
Marcello Semeraro, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos;
Antoine Kambanda, arzobispo de Kigali (Ruanda);
Wilton Gregory, arzobispo de Washington (Estados Unidos);
José Advincula, arzobispo de Capiz (Filipinas);
Celestino Aós Braco, arzobispo de Santiago (Chile);
Cornelius Sim, vicario apostólico de Brunei (Kuala Lumpur);
Augusto Paolo Lojudice, arzobispo de Siena-Colle Val d’Elsa-Montalcino (Italia);
Mauro Gambetti, francescano conventuale, custodio del Sacro Convento de Asís (Italia).
Los designados mayores de 80 años son:
Felipe Arizmendi Esquivel, obispo emérito de San Cristóbal de las Casas (México);
Silvano M. Tomasi, nuncio apostólico;
Raniero Cantalamessa, capuchino, predicador de la Casa Pontificia;
Enrico Feroci, párrodo de Santa María del Divino Amor (Castel di Leva, Italia).
“Recemos por los nuevos cardenales”, concluyó el Papa, “para que, confirmando su adhesión a Cristo, me ayuden en mi ministerio de obispo de Roma para bien de todo el santo pueblo fiel de Dios”.