El pleno del Congreso de los Diputados rechazó este miércoles el paquete de medidas sociales para la “reconstrucción” propuesto a la cámara por el PSOE y Unidas Podemos. El acuerdo entre ambos partidos excluía a la enseñanza concertada de los 2000 millones de euros previstos por el Fondo Covid para educación. “La totalidad del incremento de la inversión irá destinado a la educación pública de gestión directa”, decía el texto inicial preparado por la ministra de Educación, Isabel Celaá.
En representación de dos mil centros y más de 1.200.000 alumnos, Escuelas Católicas había considerado inaceptable esa propuesta porque “discrimina a las familias que eligen la enseñanza concertada y trata de hundir a todo un sector aprovechando la debilidad provocada por la pandemia… Esta deriva dictatorial, impropia de un país democrático y plural, nos hace preguntarnos quién está realmente gobernando en España”.
Votos decisivos
Para la derrota del Gobierno ha sido decisiva la presencia en la votación del dictamen de los 52 diputados de Vox. La formación que lidera Santiago Abascal había abandonado la Comisión de Reconstrucción el pasado 23 de junio porque, según su portavoz, Iván Espinosa de los Monteros, lo que buscaba el Gobierno con ella no era “reconstruir”, sino convertir la comisión parlamentaria en una “comisión de exculpación“: “No contribuiremos a los acuerdos a los que puedan llegar PSOE, PP y Ciudadanos”, añadió entonces.
Pero al llegar el momento de la votación en pleno, socialistas y podemitas no disponían de mayoría para sacar adelante el texto, escandalosamente discriminatorio para una cuarta parte del alumnado y de las familias. Por eso intentaron matizar el texto con una redacción según la cual “la totalidad del incremento de la inversión irá destinado a cerrar la brecha educativa, dando prioridad a todos aquellos centros que atiendan a alumnado en situación de vulnerabilidad“. El subterfugio permitía mantener la discriminación al retener el Ministerio de Educación el criterio arbitrario de definición del alumnado vulnerable.
La única esperanza de los partidos de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias era que Vox, ausente el último mes de los debates de la Reconstrucción, no acudiese a la votación en pleno de sus conclusiones. Esto habría permitido al Ejecutivo sacar adelante el dictamen de medidas sociales.
Pero no fue así, y con la oposición de PP, Vox, Ciudadanos y otros partidos que habitualmente apoyan a Sánchez, el dictamen de Políticas Sociales y Sistema de Cuidados fue rechazado por solo tres votos de diferencia. Los otros tres dictámenes salieron adelante: el de Sanidad y Salud Pública y el de Unión Europea, con el apoyo del PP y Ciudadanos, y el de Reactivación Económica, con el de la mayoría habitual (izquierdas más independentistas) y Ciudadanos.
Es la primera gran derrota de la coalición de Gobierno desde su formación el pasado 7 de enero, y una gran victoria para los centros educativos de iniciativa social. Espinosa de los Monteros lo ha celebrado, recordando el papel “decisivo” de su grupo para impedir “el ataque a la [enseñanza] concertada y educación especial”.