José Granados, experto en familia cristiana, explica el naciente Proyecto Veritas Amoris
José Granados, sacerdote nacido en Madrid en 1970, es un experto en teología del cuerpo, la familia y la afectividad. Fue consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe; de hecho, el Prefecto, Luis Francisco Ladaria, dirigió su tesis doctoral, que recibió el prestigioso premio San Roberto Belarmino. Desde 2018 es consultor para el Dicasterio de los laicos, la familia y la vida (desde 2018), Ha vivido en Washington y en Roma y es miembro de los Discípulos de los Corazones de Jesús y María.
Ahora habla con ReligionEnLibertad del Proyecto Veritas Amoris, que él impulsa junto con otros académicos y apasionados del estudio del matrimonio, la familia cristiana y el amor familiar.
– ¿Qué es el Proyecto Veritas Amoris?
– Nace como un proyecto académico, aunque también tendrá una dimensión pastoral. Somos profesores de teología y de las ciencias humanas, de distintos países, que queremos iluminar la cuestión del amor, la sexualidad, el matrimonio, la familia. Investigamos juntos, pero también queremos comunicar. Lo haremos con la revista Veritas Amoris Review y con cursos y jornadas. Trabajamos lo académico, pero también queremos formar personas y que las familias conozcan el don que reciben con el amor familiar.
– ¿Por qué el nombre Veritas Amoris?
– Significa “la verdad sobre el amor” y es una expresión de Juan Pablo II que usan también Benedicto XVI y el Papa Francisco. El amor sin verdad no dura. Y la verdad sin amor es fría y abstracta. Lo que ayuda a la persona y a la sociedad es sumar ambas cosas, la verdad y el amor.
– ¿Cuánto habrá de pastoral y cuánto de académico en Veritas Amoris?
– Queremos investigar, pero también difundir. No buscamos crear grupos de familias o de jóvenes, más bien formaríamos a profesores. Pero también queremos explicar la vocación matrimonial y familiar a las familias, y ayudar a los jóvenes a formarse para el matrimonio, y a los padres a formar a los hijos.
– En 2019 en España sólo hubo 34.000 bodas religiosas frente a 130.000 bodas civiles. ¿Pueden las parroquias españolas formar y acompañar al menos a las pocas parejas que aún deciden casarse ante Dios?
– A muchos jóvenes hoy casarse les parece un compromiso enorme que asusta. Nos gustaría fomentar entre los jóvenes, antes del matrimonio, unos pasos previos, unos compromisos previos, incluso con su liturgia. En muchos lugares antes existían los ‘esponsalicios’, que era un ritual de compromiso antes de casarse, cuando ya se hablaba de poner fecha a la boda. Existían otros ritos de paso, en el camino hacia el matrimonio.
– En España eso hoy no existe. Ni siquiera tenemos muy claro ya lo que significa la palabra “novia” o “novio”. ¿Alguien con quien te vas a casar? ¿Alguien con quien tienes relaciones sexuales? ¿Alguien con quien paseas para conocer mejor?
– Es que ya nos faltan las palabras y hasta las realidades. La sociedad dificulta el matrimonio. La parroquia debería crear ámbitos de acompañamiento, con el testimonio de otras familias, un ambiente favorable, una alianza entre familias, todo un movimiento que cree ambientes así, incluso con sus ritos. En algunas parroquias italianas muy vivas conocí pasos de compromisos prenupciales. En Veritas Amoris querríamos estudiar y fomentar esas realidades y sus ritos.
– En México tienen ritos como la fiesta de las quinceañeras, y en España en muchas parroquias se celebran los 25 o 50 años de casados…
– Sí, son ejemplos de ritos que ayudan a las familias. ¡No habría que esperar a los 25 años de casados! Se pueden celebrar momentos especiales en la vida de los hijos, momentos de perdón y reconciliación en la familia… Todo eso educa a los hijos, que ven que el amor es posible. También hay que recuperar el valor del domingo familiar. Hay que crear prácticas concretas de buena vida que puedan encajar en nuestra cultura.
– ¿Cómo ve la realidad de los cursos de pastoral familiar, o de acompañamiento a familias, en España?
– En España hay cursos de familia que integran convivencia y formación teológica y espiritual que han funcionado muy bien. También se ha generalizado y consolidado el esfuerzo por hacer cursos de preparación al matrimonio, antes de casarse. Lo que falta mucho es el acompañamiento una vez ya casados, y la formación una vez casados. Falta lo que los antiguos llamaban mistagogia, la catequesis tras el sacramento.
– El Sínodo de la Familia en 2014 habló mucho de acompañar a las familias, pero dar cursos no es acompañar…
– No. Se necesitaría crear un ambiente de familias cristianas que compartan testimonio, visión, prácticas conjuntas, itinerarios de paso e ir caminando juntos. Que puedan decir “ven y verás”. En Italia ya hay familias cristianas que conviven y rezan juntos y pasan juntos vacaciones, en esta línea. Si no puedes enseñar una vida familiar atractiva y fuerte, será difícil proponer la familia. La propuesta cristiana en sí tiene fuerza para contagiar. Y no parece que pueda ser de otra forma: de padres a hijos, y de familia a familia. En el amor humano siempre habrá una belleza que atrae.
– Pero crear esos ambientes, esas redes de familias cristianas, parece complicado…
– Se parece un poco a reforestar en zona desértica: reforestar es siempre un trabajo lento. Y va a ser necesaria una creatividad grande, que puedan aplicarse en minorías creativas que demuestren que es posible vivir así.
– Del 7 al 9 de mayo, Veritas Amoris y la diócesis de Alcalá organizan una jornada online abierta sobre familia [para inscribirse gratis haga clic aquí ]
– Sí, es como nuestro lanzamiento. Estaría bien que naciera un encuentro anual de agentes de pastoral familiar con un tema concreto. Este año el tema es más general, porque es el inicio. Planteamos grandes preguntas. ¿Es realista intentar vivir como familia cristiana? ¿Hay que renunciar a este ideal, a una forma de vida de amor y verdad? ¿O hay esperanza? San Juan Pablo II nos dejó una herencia fecunda y profética sobre amor y familia y nos indicó caminos que creemos que aún dan vida.
En su web, Veritas Amoris explica su visión de la familia y la pastoral familiar en estas 12 tesis.
El congreso en Alcalá del 7 al 9 de mayo puede seguirse desde el canal de YouTube del obispado de Alcalá de Henares, aquí.
Para inscribirse gratuitamente, haga clic aquí .